sábado, 7 de junio de 2008

everything begins here

no sabía cómo empezar. a escribir, a decir algo sobre. y a raíz de las llaves de luli se me vino todo de repente.

cuando nos separamos, ese mismo domingo a la mañana temprano, antes de bajar a abrir la puerta, le devolví a M el llavero del sapito inca, no las llaves. nunca tuve llaves. tenía sí las llaves de su corazón, ja, las llaves que fueron cambiando de la casa vieja, de la casa nueva, pero esas las había tirado ya en el primer intento de separación. a mí me gusta tirar. así me deshice de la pulserita de ojos, un par de calzoncillos, una chalina, algunas fotos y varias cartitas y poemas que ya... bueno, nada. limpiar. limpiar para cerrar.

me costó mucho que me dieran las llaves de la casa de bogotá, tuve que tocar el timbre hasta los 17 o 18. decían que, no sé, que era peligroso abrir la puerta sola a altas horas o alguna paranoia del estilo. ahora casi ni las uso, esa ya no es mi casa. las rescaté la otra noche debajo de un pilón de libros y carpetas porque me quedaba a dormir allá. qué gente extraña. llegué a las dos y estaban todos despiertos y dando vueltas, dos teles prendidas en distintos canales, la computadora, la música. esa ya no es mi vida.

cerrar para abrir. for every door that's closed, a million doors is open, cantaba marley ayer en mis oídos. a million, man, ya lo creo. de eso se trata todo esto un poco. abrir un espacio nuevo donde descubrir quién, cómo, qué. me. abrir la puerta para ir a jugar. abrir para empezar. brindo por eso.

5 comentarios:

Mercadito de barrio dijo...

El día que me separé, para no estar sola en mi casa pero tampoco tener que hablar demasiado ( opción amigas), me quedè a dormir en la casa de mis padres por primera vez desde que me mudé. Necesitaba que me prestaran un piyama viejo y suave, como una enferma bien de salud. me habían quedado las llaves de sobra atragantadas.

Margot dijo...

después de casi uno o dos años de no estar más con mi primer novio, volviendo del trabajo, reparé en que todavía tenía la llave de la puerta de su casa paterna. una cuadra antes de llegar a casa, la saqué del llavero y la revoleé a la vida. es difícil deshacerse de las llaves...

Margot dijo...

y eva, te entiendo tanto... ayer me di cuenta que en la casa de mis papás no hay tachos de basura. como si tirar algo fuese una excentricidad... !!!! dios!!!!

Margot dijo...

es como un territorio conseguido. algo que no era tuyo en un principio, pero lo supiste conseguir. una conquista. y cuando te deshacés de las llaves, parece una batalla perdida... pero no. opto por marley. a million doors. o todas las que sean suficientes. te quiero, eva!

evA dijo...

que suerte que tuvimos, marge. yo también te quiero!

who? what? no! she!